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Escapar de las balas. Esconderte en el bosque. Todo por seguir a Jesús…
Esta es la realidad del pastor Yang* y su familia, víctimas de la violenta Guerra civil en Myanmar. La persecución ha empeorado y al menos 40 000 cristianos han sido desplazados.
«No puedo hacer que mi propia familia se sienta segura. Sentimos que nos pueden matar en cualquier momento», nos confiesa entre lágrimas este pastor.
Están exhaustos. A veces sienten que Dios los ha abandonado. Necesitan tu ayuda.
¿Te unes a caminar con los cristianos desplazados para ayudar a que su fe no decaiga?
Con 45 € podríamos dar apoyo vital durante un mes a tres cristianos forzados a dejar sus casas.
«Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y dispersas»
Mateo 9:36
«La carga de huir de un lugar a otro con niños muy pequeños pesa mucho sobre mí y mi esposa... a veces me siento impotente porque no puedo hacer que mi propia familia se sienta segura»
YANG*, PADRE DE FAMILIA Y PASTOR CRISTIANO DESPLAZADO EN MYANMAR
El pastor Yang* no tiene un hogar estable, pero aun así se atreve a servir a otros cristianos desplazados
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Una amenaza de muerte le quitó el hogar y la comunidad al pastor Myint* y su familia
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¿Te acuerdas del pastor Bernabé? ¡Mira cómo tu apoyo ha llegado a este cristiano desplazado en África!
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podríamos dar formación a un cristiano desplazado por la violencia, para que persevere en medio de la persecución.
podríamos dar apoyo vital durante un mes a tres cristianos forzados a dejar sus casas.
podríamos proveer un lugar seguro donde residir, medicinas y ayuda legal para un cristiano desplazado.
Señor, gracias por ser el hogar permanente de los cristianos desplazados. Alabo tu acompañamiento y la resiliencia de ellos. Te pido por el pastor Yang, por su familia y por el resto de cristianos de Myanmar que necesitan un impulso y seguridad. Extiende tu mano y haz llegar la ayuda a los 40 000 creyentes desplazados del país. En general, te pido por todos mis hermanos en la fe que han tenido que huir de sus casas; por favor, hazles saber que no están solos y dales una salida. En el nombre de Jesús, amén.
