¿Cuántos cristianos hay en Eritrea?
Poco menos de la mitad de los eritreos son cristianos: 1,7 millones de una población de 3,7 millones. Sin embargo, los cristianos que no pertenecen a denominaciones aprobadas por el estado se enfrentan a una persecución extrema.
¿Cómo es la persecución en Eritrea?
Eritrea lleva años entre los primeros 10 de la Lista Mundial de la Persecución. Se la conoce como la «Corea del Norte de África» debido a su intenso gobierno autoritario. Eritrea solo reconoce tres confesiones cristianas (ortodoxa eritrea, católica romana y luterana), por lo que cualquiera que siga a Jesús fuera de estas iglesias reconocidas corre un riesgo constante. Incluso en las iglesias reconocidas, el gobierno vigila de cerca a todas las congregaciones. No se tolera en absoluto hablar de persecución o injerencia del gobierno en asuntos eclesiásticos.
Son habituales las redadas para detener a los creyentes que rinden culto a Dios fuera de las confesiones reconocidas. Cuando los cristianos son capturados en estas redadas, pueden ser enviados a la infame red de prisiones de Eritrea, donde pueden permanecer detenidos indefinidamente. Según las estimaciones actuales, hay unos 1 000 cristianos eritreos encarcelados, y no han sido acusados de ningún delito. Los miembros de algunas iglesias en casa llevan más de 10 años en prisión, soportando condiciones espantosas, como el aislamiento en celdas minúsculas.
El gobierno de Eritrea vigila a todos los ciudadanos, fomentando un estigma contra los cristianos. Esto implica que aquellos que se convierten del islam o abandonan la Iglesia ortodoxa eritrea para unirse a una iglesia evangélica o pentecostal probablemente enfrentarán una intensa presión por parte de su familia, comunidad y el propio gobierno. Seguir a Jesús en Eritrea conlleva un costo increíble, pero los creyentes valientes continúan caminando con Él.
¿Qué ha cambiado durante este año?
Poco ha cambiado en Eritrea este año. Seguir a Jesús sigue siendo increíblemente peligroso, y cualquiera que no pertenezca a los cuatro grupos religiosos reconocidos (los tres grupos cristianos y el islam) se expone a ser detenido, torturado, encarcelado y, en última instancia, a la muerte. Incluso quienes pertenecen a las confesiones cristianas reconocidas son objeto de vigilancia y detención por parte del gobierno.
«¿Cómo sería la persecución si los cristianos del mundo no hubieran orado por nosotros? Permanecimos firmes porque vosotros orasteis».
Peter (nombre ficticio)
¿Quiénes son más vulnerables a la persecución?
Los cristianos que se convierten del islam (y, en menor medida, los que abandonan la ortodoxia por el protestantismo) son los más presionados por la familia y la comunidad, pero todos los cristianos de Eritrea se enfrentan a un intenso escrutinio por parte del gobierno, con riesgo de arresto y detención indefinida.
¿Cómo sufren las mujeres la persecución?
En Eritrea, ser cristiano puede significar la detención indefinida, simplemente por seguir a Jesús. Para las mujeres atrapadas en la tristemente célebre red de prisiones clandestinas de Eritrea, la detención puede ir acompañada de violencia de género, incluidas violaciones y violencia sexual. Algunas mujeres se ven obligadas a huir o corren el riesgo de ser detenidas; en cualquier caso, cuando una hermana en Cristo es apartada de su familia y su comunidad, queda una familia devastada que puede ser castigada por la fe de ese miembro de la familia. Además, se exige a las mujeres que participen en el servicio militar, donde pueden sufrir violencia sexual. Muchas mujeres huyen para evitar el servicio.
Las mujeres que se convierten del islam sufren presiones adicionales. Las conversas corren el riesgo de ser secuestradas, sufrir arresto domiciliario, ser obligadas a casarse/divorciarse y que les quiten a sus hijos. Si una cristiana es secuestrada por un musulmán y obligada a casarse con él, se verá forzada a convertirse al islam. Incluso en los hogares donde no hay violencia, las mujeres cristianas que se convierten pueden ser menospreciadas por su fe, y sus padres pueden negarse a ayudarlas con cosas como las tasas escolares. En algunos casos, estas mujeres pueden incluso ser desalojadas de sus hogares y quedarse sin familia ni apoyo alguno.
¿Cómo sufren los hombres la persecución?
Los hombres cristianos que se convierten del islam en Eritrea pueden correr el riesgo de sufrir violencia física, incluidas palizas y encarcelamiento. Al igual que las mujeres, los hombres que son descubiertos como cristianos evangélicos pueden ser enviados a prisión indefinidamente. Esto es cierto en el caso de los líderes de las iglesias, que suelen ser hombres. Dado que los hombres son el principal sostén de la familia en la cultura eritrea, su encarcelamiento puede dejar a sus familias económicamente devastadas. Además, una vez «liberados», pueden ser obligados a servir en el ejército eritreo.
Independientemente de su arresto o detención, los hombres eritreos están obligados a servir en el ejército. Muchos jóvenes, incluidos cristianos, huyen para evitarlo.
Conoce a Abdullah
Abdullah, líder de una iglesia eritrea y colaborador de Puertas Abiertas en la región, compartió su historia con nosotros:
«Abdullah pasó dos años en prisión. Su esposa dice que no le permitían llevarle ropa extra y que apenas recibía comida tres veces por semana. Solo cuando Abdullah enfermó y se puso muy débil e insistió en recibir atención médica fue llevado al hospital. Lamentablemente, fue demasiado tarde y Abdullah falleció en 2022».
Abdullah
¿Qué hace Puertas Abiertas para ayudar?
Puertas Abiertas trabaja a través de colaboradores de las iglesias locales de Eritrea para ofrecer proyectos de capacitación económica, discipulado y formación para sobrevivir a la persecución.
El gobierno eritreo solo reconoce tres confesiones cristianas. Pide a Dios que intervenga para lograr la libertad de todo su pueblo.
Los cristianos corren el riesgo de ser detenidos y obligados a cumplir el servicio militar. Orad por la gracia de los presos y de quienes son obligados a hacer el servicio militar contra su voluntad.
Los cristianos encarcelados en la extensa red de prisiones de Eritrea son a menudo torturados, y se les niega el tratamiento médico cuando están enfermos. Ora para que el Espíritu de Dios sea su consuelo y compañía en la cárcel.
Ora para que Dios cambie el corazón del presidente Afwerki y su gobierno, para que permitan a los cristianos seguir a Jesús libremente.
Padre Celestial, oramos por nuestros hermanos de Eritrea. Han sido tan fieles durante tanto tiempo a pesar de décadas de incesante riesgo y violencia. Oramos especialmente por aquellos creyentes que están en prisión: Te pedimos que estés con ellos en estos momentos y los consueles. También te rogamos que cambies las cosas en Eritrea, que transformes los corazones de las autoridades que atacan a tu pueblo. Te lo pedimos en el nombre de Jesús, Amén.
