DÍA 14 — TARA
Tara, de 15 años, vive en la misma casa que su familia, pero sufre completo rechazo de ellos por su fe en Jesús.
Llegó a la fe después de que una amiga la invitara a la iglesia donde oraron por ella para que sanase de una enfermedad. «Mi enfermedad fue curada. Fue entonces cuando comencé a creer en Jesús. Encontré una paz que nunca había conocido —todo en mi vida comenzó a tener sentido».
Cuando se lo contó a su familia, le advirtieron que no hablara con nadie más en la casa y que se quedara en su pequeña habitación. «No puedo tocar nada en la cocina de la casa. El resto de los miembros de la casa dicen: “Todo, incluso el agua, se volvería impuro si lo tocaras.”»
Antes de que los colaboradores de Puertas Abiertas la conocieran, Tara había estado trabajando como jornalera para cubrir sus necesidades básicas, como comida y la matrícula de la escuela. Desde entonces, los colaboradores locales de Puertas Abiertas le han ayudado a ser admitida en un internado fuera de su pueblo y provisto de algunos artículos de primera necesidad. Sin embargo, tuvo que volver con su familia durante el confinamiento por el covid-19.
Lee Mateo 19:29
«Y cualquiera que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por mi nombre, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna».
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Elaborado por la London School of Economics esta investigación arroja luz sobre la violenta persecución a la que se enfrentan las minorías religiosas de la india. Usa las etiquetas
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