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En el marco de los preparativos para el examen periódico del historial de Derechos Humanos de Argelia (EPU), diversas partes interesadas presentaron sus preocupaciones y recomendaciones, entre ellas una coalición de organizaciones cristianas formada por la Alianza Evangélica Mundial, el Consejo Mundial de Iglesias, la Iglesia Protestante de Argelia y Middle East Concern.
En su presentación, la coalición dijo que la libertad religiosa en Argelia se deterioró desde la última revisión en 2016 hasta el punto de que «las autoridades han hecho una campaña sistemática contra las iglesias e individuos cristianos».
Desde enero de 2018, al menos 26 iglesias se han visto obligadas a cerrar sus puertas. Al menos 16 de ellas pertenecen a la Iglesia Protestante de Argelia, una red de iglesias conocida como EPA. La EPA lleva años esperando su reinscripción formal en virtud de una ley de 2006 que exige que todos los lugares de culto no musulmanes tengan licencia, al igual que sus iglesias miembros, que también han solicitado el registro.
Una comisión nacional, creada en 2006 para gestionar las solicitudes, no está operativa y, hasta ahora, no ha concedido el permiso a ninguna iglesia que lo haya solicitado.
El país ascendió en la Lista Mundial de la Persecución de Puertas Abiertas de 2022 del puesto 24 al 22 debido a las crecientes restricciones gubernamentales y al aumento de la presión.
En abril, la iglesia de «Aouchiche», miembro de la EPA en la ciudad septentrional de Bejaia, fue informada de que el gobernador había ordenado el cese de sus actividades con efecto inmediato. Ese mismo mes, un grupo de 11 cristianos argelinos de Tizi Ouzou, capital de la provincia del mismo nombre, en el centro-norte de Argelia, fue condenado a seis meses de prisión con suspensión de la pena y a una multa de 200 000 dinares (unos 690 euros) cada uno por «culto no autorizado». La policía hizo una redada en su reunión en diciembre y los detuvo por practicar un culto no musulmán sin autorización.
Dos meses antes, el gobernador de Tizi Ouzou inició un procedimiento contra un pastor y su padre con el fin de cerrar también una iglesia de 90 miembros en el pueblo de Ait Atteli.
En noviembre del año pasado, el Departamento de Estado de Estados Unidos anunció que, por primera vez, incluiría a Argelia en su Lista de Vigilancia Especial de países que «cometen o toleran graves violaciones de la libertad religiosa».
Esta semana, la Comisión de Libertad Religiosa Internacional de Estados Unidos, en un informe sobre la situación de la libertad de religión o creencia en Argelia, aconsejó al gobierno estadounidense que mantuviera al país en su lista de vigilancia debido a su legislación sobre blasfemia y proselitismo. El país ascendió en la Lista Mundial de la Persecución de Puertas Abiertas de 2022 del puesto 24 al 22 debido a las crecientes restricciones gubernamentales y al aumento de la presión sobre la Iglesia, según los investigadores de Puertas Abiertas.
Señor, te doy gracias por tu obra en Argelia. Te pido que des fuerza a cada hijo tuyo para permanecer en ti, que no se aparten de la fe. Te ruego también que toques los corazones de muchos argelinos para que conozcan la verdad y que incluso las autoridades puedan descubrir al verdadero Dios. Amén.
