Cristiana en Egipto es brutalmente atacada por su fe

Sara es una cristiana egipcia. Según nos cuenta, estuvo varios días con una sensación de preocupación e incertidumbre: creía que algo malo estaba a punto de suceder. Aun así, no tenía miedo de salir a la calle. Sara siempre va sin velo, lo que hace que sea fácilmente identificable como cristiana, pero eso nunca había sido un problema.

Como cada vez que salía, Sara oraba mientras caminaba hacia la tienda a la que se dirigía cuando, de repente, sintió un objeto afilado penetrando su cuerpo: “¡Muere, sucia cristiana!”, mientras que su cuerpo se estremecía del dolor. “Sentí que perdía mucha sangre e intenté taponar la herida con mi bufanda, pero era demasiado”, nos cuenta Sara.

Mientras Sara se desmayaba, el atacante, vestido con la típica ropa de los extremistas islámicos salafistas, continuó amenazándola. Aunque había una gran multitud viéndolo, no sintió la necesidad de huir; quizás sabía que no tendría grandes consecuencias. “Para el atacante no ha habido consecuencias por la agresión”, dice Sara, “y esto me preocupa. Esta vez fui yo, ¿y si la próxima vez fuese mi hija?”