Los cristianos en estos países controlados por el islamismo radical ya se encontraban en una situación de vulnerabilidad debido a la persecución constante que sufrían.
Según Jo Newhouse, la portavoz de Puertas Abiertas en el África Subsahariana:
“Este tipo de ideologías son algo muy dañino y peligroso para cristianos que ya de por sí están forzados a practicar su fe en secreto. Estas personas están vigiladas en todo momento por si alguna mostrara signos de apostasía hacia el islam. Muchas veces el castigo es la muerte. Estas mentiras solo añaden dificultad a una situación ya de por sí muy complicada”.
Ron Boyd Macmillan, Director de Investigación Estratégica de Puertas Abiertas Internacional comenta lo siguiente:
“Desde el inicio de la iglesia primitiva, los cristianos han sido chivos expiatorios de desastres naturales. Desde el fuego que asoló Roma en el año 64 a la plaga que se extendió por todo el imperio Romano en el Siglo II, los cristianos han sido culpados de forma injusta a la vez que se incrementaba la persecución”.
Según Macmillan para sobrevivir a una situación como la pandemia del covid-19 “Los líderes religiosos y no religiosos de la región deberían unirse en contra de un enemigo común (el virus), desechando falsos argumentos y tratando a todos con dignidad e integridad”.
Los países más vulnerables al covid-19 son también los países donde la persecución es más alta.
Una investigación reciente llevada a cabo por Puertas Abiertas en los países del África Subsahariana muestra que en estos países donde el virus podría causar estragos, existe un nivel muy alto de persecución.
Los países analizados son Sudán del Sur, la República Democrática del Congo, Sudán, Nigeria y Camerún. Además de la vulnerabilidad al coronavirus debido a la situación sociopolítica, los enfrentamientos y la falta de infraestructura sanitarias, todos estos países están clasificados como países donde la persecución es más alta.